¿Cómo se hace el chicle?
El chicle es una resina natural que se extrae de la corteza de algunos árboles tropicales. La resina se mezcla con cera y aceites para darle suavidad, y luego se mezcla con azúcar y especias para darle sabor. El chicle se ha fabricado de esta manera desde hace más de 100 años y sigue siendo uno de los dulces más populares en todo el mundo.
¿Cómo se hace el chicle para niños?
El chicle para niños se hace principalmente con goma de mascar y azúcar. La goma de mascar se extrae de la savia de ciertos árboles, y el azúcar se deriva de la caña de azúcar o de la remolacha. Otras sustancias, como la glucosa y el almidón, se agregan a la mezcla para mejorar la textura y el sabor.
Para hacer el chicle, la goma de mascar y el azúcar se mezclan en una proporción de una parte de goma de mascar para cada cinco partes de azúcar. La mezcla se derrite a una temperatura cercana a los 140°C. Mientras se mezcla, se agregan las otras sustancias para mejorar la textura y el sabor.
La mezcla se vierte en un molde en forma de barra, y se deja enfriar. Una vez que está completamente solidificada, se corta en piezas individuales para el consumo.
¿Cómo se hace el chicle maya?
Desde hace miles de años, los mayas producen una resina natural llamada chicle maya. Esta resina es utilizada para hacer una variedad de productos, incluyendo chicles, encuadernaciones, caucho y adhesivos. Aunque el proceso de fabricación del chicle maya ha cambiado poco desde la época de los mayas, la producción a gran escala es una industria moderna.
La resina del chicle maya se produce en ciertas especies de árboles de la familia Sapotaceae. El árbol más comúnmente utilizado para esto es el Manilkara chicle (Manilkara zapota), también conocido como chicle blanco. Otros árboles que se utilizan para la producción de chicle maya incluyen el Manilkara bidentada y el Manilkara kauki.
La resina del chicle maya es una sustancia pegajosa que se produce en las ramas y troncos de los árboles. Los productores de chicle recolectan la resina utilizando un cuchillo afilado para rasparla de los árboles. La resina se recoge en un envase de hoja de plátano o una bolsa de tela, y luego se lleva a un lugar donde se pueda procesar.
El procesamiento del chicle maya implica derretir la resina y mezclarla con una variedad de ingredientes, como cera de abeja, para darle una consistencia adecuada. La mezcla se enfría y se vuelve a derretir varias veces para asegurar que los ingredientes se mezclen completamente. Finalmente, se añaden colorantes y aromatizantes para darle al chicle maya un aspecto y un sabor atractivos.
El chicle maya se puede comprar en tiendas de dulces y en algunos supermercados. También se puede comprar en línea a través de sitios web dedicados a la venta de productos mayas.